¡ De algo que sirva el ordenar mi habitación impregnada en polvo !
... Hoy recordé esos ojos que me miraban fijamente cuando sin estar solos, me sonreían sin decir nada, estábamos a un centímetro de distancia y en ellos podía ver dolor, fuerza, esperanza y a la vez resignación, pero siempre me miraron con el amor que no te pude dar en ese momento...
No hay comentarios:
Publicar un comentario