miércoles, 12 de septiembre de 2012

Una carta de amor y un imbécil que la lea.

Amor ya que todo esto está empezando a tener forma, luego de algunas semanas ya cumpliendo el anhelado primer mes juntos, me comienzo a dar cuenta que ya no solo pasas de visita por mi mente, sino que ya por más de una noche, te has quedado a alojar en ella, haciéndote notar en mis sueños, en mis pensamientos, en mis deseos.
No sé que me has hecho, me he sentido tan bien contigo que a veces sueño que esto es un sueño, pero si es así no importa, porque al despertar, sería la persona más feliz del mundo al tener la certeza de que estas tan fuera como dentro de mi y de mis pensamientos. Siento que me encantas, que me es imposible alejarme de ti, juro que adoro los momentos que pasamos juntos, esos momentos en que aunque estemos callados, sé que estás ahí para mi, porque yo lo estoy y lo estaré para ti. Tienes ese algo que había estado buscando entre algunos laberintos, me perdí muchas veces, pero cuando te encontré, fui y soy una persona a la que le encanta vivir, y ver como pasa el tiempo mientras estamos juntos.
Contigo me bajaron esas ganas terribles de conquistar, de sentir lo que es amor, amor del bueno, de esos amores que cierro mis ojos y te pienso, y te sueño, y te extraño.
El conocer un antes y un ahora de ti, me hace reafirmar mi opinión, que me encantas y me gustaría pasar mucho tiempo de la vida contigo a mi lado. Siento que me gusta todo de ti, eres una bella persona, un hermoso novio y un amor como hombre.
Gracias por darme ratitos de alegría cada día, por eso es que me gustas, por eso es que no quiero dejar de verte. Gracias por los montones de cosas que pasamos juntos, gracias por esta historia que se está escribiendo, una historia de dos personas tan maravillosas como lo somos tú & yo.

Para él. Listo amiga... Ahí tú le haces los cambios que quieras.

No hay comentarios:

Publicar un comentario