Barquitos de papel.-
Zarparon quietamente por el río los barquitos
flotando por el remanso.
No los toquen, porque llevan una preciosa carga
de capullos y pétalos de rosa.
Como naves fenicia,
van con aquel perfumado cargamento.
Navega que navega, acunados por la corriente,
a la luz de la bóveda estrellada irán quizás.
¿Para quién llevarán aquella quimera de pétalos?
¿A quién van a obsequiar?
¿En qué manos inquietas volcarán los barquitos
el obsequio de la fragante carga?...
¡Quién sabe!
Lea En Colores. (el autor lo desconozco)...
Siento que cuando leí hoy esta poesía, lo primero que se me vino a la mente fue dedicársela a mi pequeño hijo que ya cumplirá su primer año de vida luego se desaparecer de mi vientre.
Siento que no es para él ahora, ni menos para un futuro... sino que es una manera de decirle que pasé situaciones extremas estando él en mi barriga, siento que no debió haber salido aún, siento que no debió haber llegado aún; pero aquí está, me acompaña mañana a mañana con el despertar de un tirón de pelo, o un mordisco de sus cuatro dientes (dos arriba y dos abajo)
Te amo hijo, gracias por llegar a cambiarme la vida y quiero que tu más adelante agradezcas por yo haberte cambiado la vida.
La historia la construimos sólo tú y yo, nadie mas.
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